La impresión termolaminada es un proceso avanzado utilizado en la industria para mejorar la durabilidad, estética y resistencia de diversos productos, especialmente en materiales impresos. Este proceso consiste en aplicar una película plástica sobre las superficies del producto utilizando calor y presión, creando un sello protector que proporciona una capa de seguridad frente al desgaste, la humedad, los rasguños y otros tipos de daños.
El termolaminado no solo protege los productos, sino que también mejora su apariencia visual al añadir un acabado brillante o mate, según la preferencia del diseño. Este acabado da una sensación de calidad superior, haciendo que las cubiertas de los libros, tarjetas, folletos o cualquier otro material impreso luzcan más profesionales y atractivas. Además, al aumentar la resistencia de los materiales, el termolaminado prolonga su vida útil, lo que lo convierte en una opción ideal para productos que requieren protección adicional y una presentación duradera.